lunes, 9 de mayo de 2016

PUQUIO, RECUERDOS IMBORRABLES

Dos tardes de toros donde afloraron variopintos conceptos y concepciones del toreo para deleite de la buena afición; con una impecable organización donde la formalidad y seriedad fueron el común denominador de las dos corridas en honor al patrono Señor de la Ascensión; algo que las grandes ferias del norte deberían emular. El torero colombiano Cristóbal Pardo se alzó con el máximo trofeo y San Pedro galardonada como mejor ganadería; en tanto hubo un torero llamado Alberto Aguilar, que dejó impronta de gran dimensión torera en faena de efemérides en la última tarde.

(Desde Puquio, Ayacucho, textos y fotos de Juan Medrano Ch. Especial para Perú Toros y revista Fiesta Brava)


Puquio es ciudad capital de la ayacuchana provincia de Lucanas, en el extremo sureste del Perú. La gran historia de sus barrios, sus costumbres y la energía laboriosa de su gente, fueron motor y motivo de la inspiración del gran José María Arguedas, el escritor que vivió y convivió con la entraña del pensamiento indígena en las comunidades lucaninas, plasmados para la posteridad en novelas, cuentos y relatos de su copiosa producción literaria.

En mayo, mes de las flores y del retoño de los maizales, Puquio celebra al Señor de la Ascensión. Su imponente procesión recorre los tradicionales barrios de la ciudad, antes del solemnísimo retorno nocturno de la imagen del Cristo crucificado, al antiguo templo de Chaupi, donde aguardará en su altar hasta la próxima temporada. 

Tras los actos religiosos, festivos y costumbristas, llegan las tardes de toros en el emblemático coso Antonio Navarro, ubicado en el barrio Ccayao,uno de los espacios más prominentes de la ciudad. Alberga más de 4,000 espectadores y esta temporada sus autoridades inauguraron obras de construcción de tres corrales, para la seguridad y adecuado manejo del ganado bravo.

Los carteles tuvieron peso específico y salvo Uriel Moreno El Zapata y Alfonso de Lima, que se presentaron por tercera temporada consecutiva en Puquio, los otros tres espadas fueron novedad; Cristóbal Pardo y los españoles Sánchez Vara y Alberto Aguilar; y una ganadería limeña, Santa Rosa de Lima, que también irrumpió por estos lares con mucha regularidad en el desempeño de sus pupilos. 

En conjunto, la presentación y el juego de los toros fue variado; dispares los santarrosas y más hechos los sampedros, destacando en la primera tarde el 3° y 5° del señor Galdós, este último premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre; y nítidamente por encima de los demás, el corrido 6°, del señor Orlando Sánchez Paredes, un bien construido toro que tuvo como virtudes la movilidad, codicia y nobleza, aunque un punto falto de clase y bravura en varas; a la postre indultado por Cristóbal Pardo

En la segunda tarde el corrido 3° de Santa Rosa fue bravísimo en el caballo, empujando con riñones y pitones en rectitud por debajo del peto y creciéndose al castigo. En la muleta tuvo regularidad sin romper por abajo; fue bravo, pocos lo notaron y arrastrado sin pena ni gloria. Sobresalieron también el 5°, magníficamente toreado por Alberto Aguilar, y el 6°, de buen inicio que acabó pareciendo malo por la inapropiada lidia del espada; ambos con el hierro de San Pedro.

De los coletas y a nuestro juicio, Alberto Aguilar fue el que mejor interpretó el toreo. Tiene concepto puro y lo demostró en sus dos toros la tarde del domingo día 8 de mayo. Primero con el buen Santa Rosa al que pinchó, y luego ante el enclasado 5° de San Pedro, al que bordó con verónicas de pasmo y series de derechazos y naturales pura fantasía, matando además en el sitio; la gente, algo fría, no lo percibió; la presidencia tampoco valoró aquella obra de arte y sentimos vergüenza ajena que el torero marchara sin siquiera aplausos de reconocimiento. 

Sánchez Vara, a pesar de no ser un iluminado del toreo, estuvo por encima de sus oponentes en la primera tarde. Muy templado con el capote ante el jabonero que hizo 2° y aunque persistente y con mucho poder en la muleta, el animal se le apagó y tuvo que esperar al 5° para sentirse y disfrutar el toreo, sobre todo por el lado izquierdo del animal. Pena que pinchara, pues tras apostar por el indulto pasó la marimorena con el acero.

Destacable el esfuerzo, disposición y entrega del Zapata en sus dos actuaciones. Es torero variado que se expresa en muchas suertes y en banderillas,- cuando el toro se lo permite-, pone boca abajo la plaza. Esta vez los toros no le ayudaron porque de cuatro dos fueron imposibles y a los otros dos se les diluyó el fuelle a media faena. A pesar de ello en la primera tarde lució más asentado y pudo haber paseado trofeo del 1°, si la gente hubiera estado más metida en el quehacer del torero de Tlaxcala. La oreja del 4° con la unánime petición del segundo trofeo en la segunda tarde, supuso un inmenso baño de popularidad reflejada en la apoteósica vuelta al ruedo,- a la mexicana-, que el torero dio entre vítores y aclamaciones. 

Cristóbal Pardo puso su cuota de oficio y actitud en su presentación del sábado día 7 de mayo. Apretado por la categoría de sus alternantes, el torero de Caldas estuvo a la altura con el 3°, destacando la belleza de sus quites por chicuelinas y los naturales por el mejor lado del animal, entonando un poco la frigidez del público en los tendidos. Con el 6° pudo expresarse mejor; el toro se le arrancaba en largo y obligado a meterse en la faena, se prodigó en muletazos sobre ambas manos. El toro tenía tranco, continuidad y nobleza, pero adolecía de clase, por lo que la faena no llegó al culmen; mas, la afición disfrutó allá arriba, respaldando una moción de indulto que pronto prosperó, paseando en volandas el torero los máximos trofeos. Alfonso de Lima no tuvo una buena tarde. Sus ganas y gran disposición se estrellaron contra la mala suerte que inició en el sorteo y cerró con el 6°, un toro que además de sus buenas hechuras, tuvo un inicio interesante que el torero desaprovechó, sin acople, embarullándose y dejándose enganchar reiteradamente.

Ficha. Sábado día 7 de mayo de 2016. Corrida de Toros. Tarde soleada con plaza rayando en lleno. Se corrieron astados de Santa Rosa de Lima 1°, 2° y 3°, y San Pedro 4°, 5° y 6°, este último indultado. Uriel Moreno El Zapata (Berenjena y Oro) Estocada desprendida, palmas. Media estocada desprendida, palmas. Sánchez Vara (Rosado y Oro) Estocada caída, palmas. Estocada desprendida y trasera, seis descabellos, vuelta al ruedo tras aviso y vuelta al ruedo al toro en el arrastre. Cristóbal Pardo (Sangre de Toro y Oro) Pinchazo y estocada caída, palmas. Dos orejas y rabo simbólicos.

Ficha. Domingo día 8 de mayo de 2016. Corrida de Toros. Tarde soleada con plaza llena. Astados de Santa Rosa de Lima 1°, 2° y 3°; y San Pedro 4°, 5° y 6°. Uriel Moreno El Zapata (Canela y Oro) Media estocada delantera, palmas. Estocada baja, oreja tras petición del segundo trofeo. Alberto Aguilar (Celeste y Oro) Estocada tendida y trasera, estocada trasera y caída, palmas. Estocada entera en lo alto, ovación. Alfonso de Lima (Gris y Oro) Dos pinchazos, estocada delantera y caída, silencio. Estocada delantera y caída, palmas.


 Procesión de la imagen del Señor de la Ascensión, patrono de Puquio, cuya anda cargan un grupo de devotas mujeres.

 Y el paseíllo, con plaza llena y las banderas de Perú, España, México y Colombia, ondeando allá arriba...

 El Zapata abrió plaza con este ejemplar de Santa Rosa de Lima, al que remata de rodillas con el capote...

 Y quita Sánchez Vara grácilmente por navarras...

 Retrucando El Zapata, picado ya, por vistosas zapopinas...

 Y cambiándoselo por detrás en los medios...

 Recetando muletazos muy quieto, hasta que el bicho se apagó. El 4° tuvo muy mala condición.

 Sánchez Vara mostró gran actitud y salió a por todas ante este jabonero que se vino a menos en la muleta...

 Pero ante el buen 5° de Santa Rosa mostró detalles, como el de citar sentado en una silla, celebradísimo por el público...

 Toreando muy aseado...

 Y sentido y profundo, aprovechando la buena clase del animal...

 Recibiendo el cariño de la gente...

 Y el animal premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre.

 El 3° de Santa Rosa, para Cristóbal Pardo, se dejó torear con el capote...

 Pero la sorpresa llegaría con el 6°, uno de San Pedro de bonitas hechuras que tuvo codicia y mucha movilidad...

 E iba a media altura...

 Y por ambos pitones...

Indultándolo finalmente el torero caldense ante el clamor de la multitud.

Segunda Corrida de Toros

 A las tres de la tarde en punto, los chalanes de la región engalanaron la tarde de sol, sangre y arena...

 Con las ancestrales melodías del wakrapuktu...

 Y madres y niños puquianos que asistieron a la plaza...

 Para disfrutar de una buena tarde de toros, con este pedazo de cartel...

 Que abrió El Zapata, con este ejemplar de Santa Rosa, que me dio le sirvió...

 En cambio el 4° tuvo más importancia y pudo mostrarse...

 Banderilleándolo discretamente...

 Y dedicando la muerte del toro a una ocasional madre puquiana, en su día...

 En faena de actitud...

 Y mucho efecto para la galería...

 Cortando una oreja que paseó entre grandes aclamaciones.

 Pero si hubo alguien que descolló, ese fue Alberto Aguilar, torero de Madrid...

 Que vino con su banderillero César de Madrid, al que este toro le hizo hilo salvándose de inminente cornada...

 El recital llegó con el 5°, uno de San Pedro al que Aguilar bordó con el capote...

 Y con la muleta...

 Sobre ambas manos, por si alguien duda. Lástima que el usía no lo percibió, y este gran torero se fue con las manos vacías.

 Alfonso de Lima se estrelló con este garbanzo...

 Pero con el 6° pudo cambiar la historia...

 Aunque el buen Denis Castillo, su colocado, pasó apuros...

Y finalmente no pudo acoplarse a las complicadas  embestidas del bonito San Pedro.