miércoles, 2 de octubre de 2013

EL AROMA DEL TOREO

Brota de las muñecas de Cubas en la última de Santa Cruz con triunfo y puerta grande. La corrida otra vez mansa y complicada; dos buenos toreros pegaron la vuelta en desilusión y uno de ellos a la enfermería con pronóstico menos grave...

(Desde Santa Cruz, Cajamarca, textos y fotos de Juan Medrano Ch. Especial para Perú Toros)


El mundo no podía seguir siendo tan ancho y tan ajeno para los toreros de Santa Cruz que esperaban ilusionados por un toro que les embistiera. “Todo lo malo debía haber salido ya y en los corrales tenía que aguardar algo potable, algo como para disfrutar y sentirse torero”, comentaban los coletas durante la mañana horas antes del sorteo.

En el paseíllo los trajes de luces volvieron a refulgir al sol y la plaza lucía un lleno de bote a bote, con decenas de personas en las afueras pugnando por entrar al recinto cuyo aforo estaba totalmente cubierto por unas seis mil personas. Era la última corrida de la feria patronal y habría que esperar un calendario para volver al terruño y disfrutar del espectáculo junto a la familia y amigos.

Pero la historia no cambio más que para un torero: Juan Carlos Cubas. Los otros dos, los españoles Israel Lancho y Luis Miguel Vásquez, marcharon de vacío con mínimas satisfacciones. Lancho tratando de justificarse con un manso de Huacraruco que volteaba en contrario y al que robó derechazos al hilo de las tablas; el otro de Salagual que predecía cosas buenas por sus hechuras, resultó una prenda imposible de lucir a pesar de la vehemencia del espigado torero. Vásquez, fiel a su buen concepto, hizo el esfuerzo con el 2°, de muy mala clase; pero el geniudo y marrajo 5° le contusionó la cervical y lo mandó al hospital donde permaneció dos horas en observación, según el parte médico del doctor Carlos Cruzado.

Cubas pechó un lote bonancible esta vez. Lo necesitaba tras los fiascos de los días anteriores. Las buenas maneras del huancaíno se vislumbraron desde que se abrió de capa con el bonito castaño de San Simón que arreaba doliéndose y a regañadientes, arrancándole muletazos de su marca por el pitón derecho. Su quehacer subió de tono y con la gente entregada lo pinchó y todo quedó allí. El 4°, de Huacraruco, tuvo salida de tonto pero tras echarle el capote arreó con clase, continuidad y nobleza; esta última su mejor virtud del que el peruano sacó partido para ligar muletazos con artísticos cambios de mano por detrás y en el último tramo arrimarse para atizar la emoción en los tendidos. La estocada no fue suficiente pero el contundente descabello hizo aflorar el unánime pedido de trofeos.

Ficha. Martes día 1 de octubre de 2013. Último festejo de la feria en honor al Señor del Costado. Corrida de Toros. Tarde soleada al inicio del festejo con garúa ligera a partir de la lidia del 5° ejemplar. La corrida saltó bien presentada; 1° y 5° de San Simón, este último con genio y peligro; y 2°,3°,4° y 6° de Salagual y Huacraruco, en general mansos y de mala clase, excepto el 4°, noble y codicioso, premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre.

Juan Carlos Cubas (Azul pavo y oro) Pinchazo, estocada tendida y desprendida, descabello, palmas tras dos avisos. Estocada tendida y traserilla, descabello, dos orejas.

Luis Miguel Vásquez ( Lúcuma en azabache) Estocada y perpendicular, descabellos, palmas. El 5° fue despachado por Juan Carlos Cubas, como director de lidia, tras ser arrollado por el toro y trasladado a la enfermería.

Israel Lancho (Salmón con remates en azabache) Tres avisos y estocada entre sombras, palmas.

N.R: Nos informaron que tras el arrastre del último ejemplar, al caer la noche, se realizó la ceremonia de premiación:

Triunfador de la feria: Diego Dos Santos El Portu

Mejor Banderillero: Darwin Salazar Tachuela

Mejor Ganadería: Salagual.


Juan Carlos Cubas


Luis Miguel Vásquez

Israel Lancho